Los dos equipos salieron bien posicionados a la pista, pero desde el inicio se vio a un equipo que fue a por el partido y a otro que las veía ver, este último éramos nosotros. A los pocos minutos de iniciarse el encuentro crearon la primera ocasión clara de gol que Nico sacó con la pierna, pero pocos instantes después, en una perdida en medio del campo, montaron una rápido transición subiendo el primero al marcador. Ese gol nos hizo mucho daño, el equipo no dio señales de recuperación y poco después nos metieron el segundo. Con el 0-2 en el marcador pedimos tiempo muerto pero el equipo estaba colapsado, con falta de concentración, pérdidas de balón que nos costaron tres goles más de ahí al descanso llegando con un 0-5. Ellos tampoco estaban haciendo un gran juego, pero estaban siendo muy efectivos de cara a gol y aprovechándose de los muchos errores y desajustes defensivos.
El equipo salió a la segunda parte con otra cara, completamente distinta, con otra actitud, con menos errores en los pases y con más intensidad defensiva, de la cual carecimos en la primera, y en 10 minutos conseguimos dos goles y recortar distancias por medio de Diego José y Diego Iglesias. El equipo ganó confianza en lo que estaba haciendo y se volcó en la portería contraria generando ocasiones de gol que desbarató muy bien su portero. Ellos consiguieron subir el sexto al marcador y de ahí hasta el final del partido conseguimos marcar el tercero llegando al final del partido con el resultado de 3 a 6.
Si queremos mirar en la tabla clasificatoria hacia arriba no podemos ser tan irregulares y dar dos versiones tan distintas en un mismo partido, toca entrenar fuerte y resetear las ideas y conceptos para afrontar el tramo final de esta segunda fase.